martes, 21 de julio de 2009

FINANCIACIÓN DE LA DEMOCRACIA

El miércoles por la tarde conocíamos la magnífica noticia de la aprobación de un nuevo sistema de financiación autonómica que se hacía con el consenso y el interés de todos, menos con el PP, que de manera patética se abstenía, aunque no renunciando a los miles de millones de euros extra que este reparto otorga a sus comunidades.

Por primera vez estamos ante un sistema verdaderamente equitativo y basado en la igualdad, que se ha construido sobre la base de la población y de los derechos que la Constitución y los estatutos de autonomía nos otorgan a los ciudadanos y ciudadanas. Por primera vez un gobierno busca financiar la ciudadanía en términos de derechos, a los servicios públicos de los españoles, y no a los territorios o a los gobiernos que administran los territorios de este Estado complejo y complicado que es España.

Estamos pues, ante un cambio de concepto, que claramente la derecha de este país, que jamás ha otorgado a los súbditos de la Corona española la condición de ciudadanos, no entiende y de entenderlo no comparte, porque el PP busca financiar el poder, no el Gobierno de las Comunidades Autónomas como parte indisociable del Estado. El Partido Popular plantea con ello un divorcio de las autonomías con respecto al Estado, algo que viniendo de la derecha es especialmente paradójico por separatista. Otegui debía reflexionar sobre este aspecto y posiblemente se daría cuenta de lo profundamente conservador de su pensamiento.

Me gustaría resaltar el papel exitoso que Andalucía y los presidentes Chaves y Griñan han jugado en sacar adelante este modelo. No me interesa destacar las cifras finales de Andalucia porque no pretendo humillar al ya maltrecho Arenas, quien últimamente no duerme bien y se despierta todas las noches con las pesadillas que le provoca el tesorero Bárcenas dando una completa rueda de prensa mientras Esperanza Oña ríe y ríe.

Quiero destacar la apuesta patriótica y democrática, la asunción de la responsabilidad que gobernar Andalucia impone con respecto a la construcción de España. Asimismo quiero subrayar que de nuevo, como ya ocurriera con el desarrollo autonómico a principio de los 80, se hayan sentado las bases de un nuevo sistema de referencia sobre el que construir el edificio de la democracia en España. También quiero resaltar que todo ello se haya hecho ahora desde el concepto de igualdad distributiva, haciéndonos más ciudadanos a los ciudadanos españoles, al fijar la financiación per cápita de los servicios como elemento fundamental del modelo.

3 comentarios:

Mari dijo...
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Mari dijo...

Estimado Mario, por favor, que no quede impune el derrame de petróleo, que no les salga más barato contaminar que producir. A este tipo de empresas hay que exigirles todas las garantías de seguridad y en los últimos años los desastres en la monoboya ya han pasado con demsiada asiduidad. No al petróleo.

Mari dijo...

Mario, ¿por qué no se promueve la rehabilitación del cargadero de mineral de corrales? siempre me apena ver como "nuestros monumentos" se dejan al abandono.